En el mercado inmobiliario vigente, se tienden a asociar los conceptos de “lujo” con “gran tamaño”. La idea de este proyecto era disponer departamentos de alto standard pero de menor metraje que lo convencional y con las mismas propiedades en cuanto a comodidad espacial, acabados, etc…
Las características de formato, ubicación, topografía y orientación del terreno, fijaban condiciones ineludibles para la conformación de este condominio. El resultado de ello son dos bloques desfasados con departamentos de 260 m2 que aprovechan la pendiente natural para compartir un gran jardín al norte y una magnífica vista despejada al valle de La Dehesa. La medida separación y desfase de los dos edificios asegura la independencia de visuales y contribuye a conformar una plaza de llegada con juegos de escaleras, plataformas, jardineras, miradores, cascadas y espejos de agua, que enriquecen el espacio en una condición lúdica